Se acabó, lo hizo...
Sí, sí, lo hizo...
¿De verdad debería creer que nuestra mistad era algo importante?
La conozco desde que tenía un años, uno. Ni siquiera recuerdo las cosas de entonces, el tiempo ha pasado y siempre hemos estado juntas. Supuestamente yo era para ella lo que son nuestros padres... pero no.
Desde chica siempre he oído a mi padre y al suyo la misma explicación: “Nos hemos criado juntos y no somos hermanos de sangre pero sí de vida".
¿La verdad? Creo que todos hemos soñado con algo así; con una amistad desde siempre y para siempre. Por desgracia pocos disfrutan de ella de verdad.
Creía haberla encontrado, pues la conozco desde que nació, cuando yo apenas tenía un año. Pero ahora llevamos 3 meses sin hablarnos; yo lo intenté, pero no hay forma de que las cosas cambien y he llegado al punto en que prefiero que se marche. La creía diferente a como está siendo. Al final es verdad que la gente cambia sin que lo esperes, de la noche a la mañana, incluso a quien mas crees conocer.
Lo peor es que te dejen de lado sin una explicación y sin que ocurra nada, pero supongo que así también descubres que la vida nunca es predecible y que a veces quien más tiempo lleva a tu lado es quien te falla primero. Y por desgracia es una realidad, la vida está llena de decepciones. Por suerte también de alegrías y para vivir de verdad y valorar las cosas, has de pasar por ambas. Así que supongo que hay que vivir las decepciones y aprender de ellas.
Escrito por @srtadesquiciada
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