Sexo y embarazo... ¿compatibles?

Creo que desde que tengo conversaciones adultas he oído que el embarazo es de las etapas más fogosas en la vida de una mujer. Como ya es sabido, no hay ningún peligro – salvo casos concretos – ni para el bebé ni para la madre, ¡incluso dicen que es bueno! así que yo esperaba mis cuarenta semanas de gloria con gran expectativa.

Y han llegado… bueno, de momento llevamos treinta semanas y… la lujuria no ha encontrado mi casa… vale, a veces sí que llama, pero no le hacemos mucho caso…A ver, os cuento…

Ha habido momentos apasionados en estos meses - bien aprovechados, hay que decir - pero por logística hemos tomado la decisión de dejar el tema aparcado durante un tiempo… Sinceramente, las ganas están… ¡Morfeo me tiene martirizada con el tema! Pero cuando llega el momento de ponerse, empiezan a surgir inconvenientes. Al principio del embarazo es más asequible el objetivo, aún hay agilidad, el bebé es tan pequeñito que ni rozará las paredes de su nidito,… pero tú estás tan cansada, con sueño, hambre, que encontrar el momento oportuno es lo más difícil. Luego la barriga va creciendo, esa es la fase de: daño no le hace, pero ¿y si hago un mal gesto? ¿y si damos un golpe sin querer? La cosa se va poniendo cada vez más difícil, tienes la cabeza más en tu barriga que dónde debería estar. Y más tarde…el bebé ya se mueve, da golpecitos, volteretas ¡se lo pasa genial ahí dentro! Y es entonces cuando te pones en situación y no dejas de pensar que desde dentro él está en plan animadora, encantado con la fiesta.

Sé que en realidad no es tan complicado, y que hay muchísimas parejas que disfrutan plenamente en esta etapa; pero pienso que a la gente no le importa hablar de sus grandes logros, sobre todo en el terreno sexual, en cambio, sí que da pudor, incluso vergüenza, reconocer debilidad en ese campo. Pues aquí estoy yo… orgullosa de ser… ¡una embarazada célibe!

No sé si debemos estar en el equipo de la mayoría o de la minoría, pero tampoco nos importa. Ha sido una decisión de dos, y esperamos la recompensa con ganas.

¡Saludos!

Indiana